El plan del presidente Javier Milei para blindar el DNU que autoriza el acuerdo con el FMI quedó en pausa luego de que se suspendiera la reunión de la Comisión Bicameral que debe discutir ese decreto, en un contexto de máxima tensión por la interna que explotó el día con un enfrentamiento a golpes entre dos diputados del oficialismo, en plena sesión.
La Comisión Bicameral que preside el senador oficialista Juan Carlos Pagotto iba a reunirse este jueves a partir de las 13:30 y La Libertad Avanza se había ilusionado con la posibilidad de firmar el dictamen para el DNU o, al menos, dejar el terreno preparado para ese dar ese paso clave en la estrategia del Gobiernoen los próximos días.
Interna en el oficialismo: cómo afecta el plan de Javier Milei para el DNU del acuerdo con el FMI
Fuentes parlamentarias indicaron a iProfesional que influyó mucho en esa decisión la pelea que protagonizaron el día anterior el diputado libertario Lisandro Almirón y Oscar Zago, ex jefe del bloque La Libertad Avanza que actualmente encabeza el MID sin dejar de ser un aliado del Gobierno, que lo cuenta casi como propio.
El problema para el plan del Gobierno es que los dos diputados integran la Bicameral e iban a cruzarse nuevamente. El clima sigue caldeado porque el motivo de fondo de la pelea (una interna no resuelta por la conducción de la Comisión de Juicio Político) no se resolvió y el conflicto expuso una vez más la falta de orden en la tropa oficialista.
La explicación oficial de la suspensión de la Bicmeral fue muy distinta. El oficialismo indicó que se decidió reprogramar la reunión para la semana próxima porque asistirán a responder preguntas funcionarios del Ministerio de Economía.
Sin embargo, pocos en el Congreso creen en esa justificación, porque ya estaba previsto que en esta primera reunión se informara la visita de funcionarios para hablar sobre el acuerdo con el FMI, según indicaron fuentes de ese cuerpo.
Incluso dentro de La Libertad Avanza hay quienes le dan más crédito a la versión de que la violenta pelea entre dos miembros de la comisión que son clave para la estrategia del Gobierno alteró la hja de ruta para tratar el DNU, según supo este medio.
Clima tenso y una definición pendiente en la Bicameral de DNU
Pero a ello se le sumó otro factor relacionado con la interna y es que el kirchnerismo y otros bloques iban a poner en discusión durante el encuentro la presidencia de la Comisión Bicameral, que debe alternar entre ambas Cámaras. Como actualmente está encabezada por un senador, este año le tocaría a un diputado.
Si bien no estaba previsto que la oposición dura se encaramara sobre esa silla, estaba abierta la posibilidad de que el lugar de Pagotto lo ocupara Zago, que es un aliado fiel a Milei pese a su enfrentamiento con las otras autoridades de La Libertad Avanza, según pudo reconstruir este medio.
Tras la pelea con Almirón ese plan entró en duda y el oficialismo no habría querido correr el riesgo de perder el control de una Bicameral que es central para la idea del Gobierno de blindar el acuerdo con el FMI ante el Congreso mediante un DNU.
Zago se disculpó, pero la pelea sigue: ¿cuál es el origen de la interna?
Luego del bochorno en la Cámara de Diputados, Zago se disculpó públicamente por lo ocurrido. «Cometí un error, lo tendría que haber resulto en otro ámbito», señaló en un raid de declaraciones a la prensa donde expresó sus disculpas con el electorado de la Ciudad que lo eligió y también con Bahía Blanca: «Está pasando por un terrible momento y nosotros estamos dando este escenario bochornoso», reconoció.
Si bien admitió que cometió «un error» que «tendría que haber resuelto en otro ámbito», el ex jefe del bloque oficialista le apuntó al presidente de la Cámara baja, Martín Menem. El diputado que responde a Karina Milei levantó la sesión en medio del escándalo, cuando el tablero marcó uno menos que el quórum reglamentario.
«Muy mal el presidente Menem de haber logrado su objetivo, que la casa de la democracia no funcione», disparó Zago al tiempo que remarcó que el riojano «tiene una responsabilidad superior a todos los demás» y debió haber asegurado el orden de la sesión. Además, en su ronda de declaraciones deslizó que el titular también tuvo que ver con la pelea y agregó: «Tienen un problema dentro de La Libertad Avanza que no lo pueden resolver y fueron por la violencia».
De esta forma apuntó a la versión que dieron en otros bloques respecto de que Almirón intentó sacar por la fuerza a Zago de su banca para que no diera quórum en momentos en que el kirchnerismo presentaba una moción sorpresiva (y obviamente en contra del Gobierno) mientras se preparaba una votación para obligar a «normalizar» la Comisión de Juicio Político. Eso fue lo que generó la reacción del diputado porteño.
La Comisión de Juicio Político es el origen de la pelea. El año pasado, Zago -que hasta entonces era jefe del bloque oficialista- avaló que la presidencia fuera para Marcela Pagano, pero Menem y el resto de la bancada libertaria boicotearon la reunión de la comisión y desconocieron a la diputada, que también participó de la pelea aunque su cruce fue con Lilia Lemoine, quien al igual que Menem responde a Karina Milei.
Los dichos de Zago pusieron en evidencia que la interna no terminó y que afecta a la conducción de La Libertad Avanza justo en momentos en que enfrenta desafíos importantes en el Congreso, entre los que se destaca la ratificación del DNU que autoriza a Milei a firmar el acuerdo con el FMI.
Los interrogantes que penden sobre el plan del Gobierno para defender el acuerdo con el FMI
El DNU tiene fuerza de ley desde que se publicó en el Boletín Oficial y solo perderá vigencia si ambas Cámaras del Congreso lo rechazan. En el Gobierno confían en que eso no ocurrirá pero para dejar blindado el decreto y por lo tanto el acuerdo con el FMI -cuyos detalles técnicos evitó informarle al parlamento hasta ahora- necesitan que al menos una lo apruebe.
El plan apunta a la Cámara de Diputados, donde a La Libertad Avanza le resulta más fácil encontrar apoyo de otros sectores políticos. La situación que se generó y que involucra a un aliado como Zago, a las diputadas del propio bloque oficialista y a Menem aparece ahora como un gran interrogante sobre la capacidad del Gobierno para abrochar los acuerdos que necesita.
A eso se le suma que, como primer paso de la estrategia, lo más conveniente para el oficialismo sería lograr un dictamen de mayoría favorable al DNU en la Comisión Bicameral. Necesitaría 9 de las 16 firmas que tienen los diputados y senadores que integran ese cuerpo, aunque tiene la ventaja de que si hubiera empate se toma como despacho mayoritario el que tiene la rúbrica del presidente del cuerpo.
Aquí sobresale el hecho de que el Gobierno espera llegar por lo menos a 8 firmas, entre las cuales están las de Almirón y Zago, y que en ese caso necesita que el presidente de la comisión siga siendo un leal a la Casa Rosada como Pagotto.
De esta forma, la interna del oficialismo y el clima espeso que se respira en el parlamento empiezan a sembrar dudas sobre el plan de Javier Milei para blindar el DNU que autoriza el acuerdo con el FMI. Si bien su vigencia todavía no corre un riesgo que preocupe a la Casa Rosada, el oficialismo necesita mantener bajo control su recorrido dentro del Congreso.