Como en un sube y baja, ahora los argentinos vuelven con sus autos cargados con compras del supermercado en Chile. En 2023, fue al revés. Hoy los turistas argentinos consiguen una diferencia de precios de hasta 60% y, excepto la carne, el resto está más barato o igual que en nuestro país.
Los argentinos, que piensan y ahorran en dólares, siguen beneficiándose con el tipo de cambio en el país trasandino. El dólar sube y el peso chileno se devalúa. Un dólar equivale a 1.017 pesos chilenos.
La conveniencia de las compras es el principal motivo que impulsa a viajar este verano a la zona central de Chile, más que sus playas.
Si bien hay hermosos paisajes y muchas playas con buena infraestructura hotelera, gastronómica y de paradores, la mayoría no son aptas para el baño y, en las habilitadas, el agua es fría, con una temperatura de 16 grados, en promedio, durante enero.
La visita a los supermercados de Valparaíso, Viña del Mar o La Serena, principales ciudades elegidas por el turismo que va a las playas del Pacífico, es muy atractivo por la variedad y cantidad de productos importados.
Las marcas chilenas de lácteos, carnes de aves o cerdo, galletas o dulces, y bebidas, entre otros productos, también son más económicas que las producidas en argentinas.
Uno de los casos más llamativos son las marcas argentinas, que cuestan menos del otro lado de la cordillera. Por ejemplo, la lata de cerveza Quilmes, en un pack de 24, sale 460 pesos chilenos cada lata, que en pesos argentinos son 540 (0,45 dólares blue). En Argentina una lata chica de la misma marca puede costar más de 1.900 pesos.
El litro de leche de primera marca, en Chile cuesta 990 pesos chilenos, menos de un dólar (0,98 USD), mientras que en Argentina, sale unos $1.800. Y un pote yogurt de 125 gramos, cuesta 350 pesos chilenos (0,34 dólares) y en Argentina, $600.
El único producto que es más caro en Chile es la carne vacuna. Un kilo de vacío 17,40 dólares en Chile, en Argentina cuesta $13.000 (10,8 dólares blue).
Las carnes de pollo y los huevos, por ejemplo, son más baratos en las costas chilenas. Un kilo de supremas de pollo cuesta $8.700 pesos chilenos (USD 8,7), en Argentina $11.000. Y una docena de huevos vale $3.000 (2,96 dólares) y en Argentina $4.000, en promedio.
Un litro de jugo de naranja en caja, de primera calidad, $1.800 chilenos (1,7 dólares) y en Argentina cuesta alrededor de $4.000.
El fernet, botella de 750 cc, primera marca importada, en Chile cuesta $10.900 (10,8 dólares) y en Argentina, casi 12 mil.
La Coca Cola retornable, sabor original, de dos litros, en el supermercado Líder está de oferta a 1.490 pesos chilenos (USD 1.49) y en Argentina, $2.030.
La palta, que es muy consumida y exportada en Chile, es una de las frutas que están al mismo precio: a 6.990 pesos chilenos el kilo; y en Argentina, 6.900 pesos.
Prepararse un sandwich es más barato. En Chile, un pan lactal cuesta $2.000 y en Argentina, $2.600. El jamón $1.075 los 100 gramos, y el queso Gauda laminado, $1.900 los 100 gramos.
En qué pagar
El cambio en Chile está casi uno a uno con Argentina: 1.000 pesos chilenos equivalen a 1.022 pesos argentinos (1 dólar oficial).
Lo que más conviene al turista argentino es pagar con tarjeta de crédito a valor dólar, comprar dólares MEP y pagar el resumen con esos dólares (con stop debit, entre la fecha de cierre y vencimiento).
En las casas de cambio trasandinas, en la primera semana de enero, por cada dólar, pagaban entre 950 pesos chilenos (en shoppings) y 976 pesos chilenos (en los bancos), según las distintas entidades financieras.
Lo que menos conviene es cambiar pesos argentinos por pesos chilenos, en ese caso en las casas de cambio de los shoppings de Santiago dan 650 pesos chilenos por cada 1.000 pesos argentinos.
PS