Lo que parecía el paraíso se convirtió en un infierno para el australiano que quiso aprovecharse de una falla financiera.
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Luke Brett Moore gastó aproximadamente 2 millones de dólares en una vida de lujo y excesos.
Es sabido que cuando ocurre un error bancario el dinero que se obtiene no es legítimo, y tampoco legal. Para Luje Brett Moore esto importó poco. Luego de descubrir cómo, a través de una falla bancaria, pudo obtener crédito ilimitado sin tener que pagar las consecuencias, utilizó la situación a su favor para llevar adelante una vida de lujos.
El joven tenía un trabajo como operador de montacargas y lo había perdido, por lo que estaba en dificultad para pagar su hipoteca. Pero el St George Bank le ofreció una inesperada solución que lo sacó de este apuro, e incluso lo llevó a tener una vida que jamás se habría imaginado.
¿Cómo transformó Luke Brett Moore un error bancario en una vida de excesos?
Al empezar a realizar transacciones a través del St George Bank, se dio cuenta que podía comprar bienes por montos excesivos y que no tenía en su cuenta para respaldar dicha operación. Comenzó analizando la situación con adquisiciones pequeñas y después fue testeando cada vez más donde estaba el límite: no había.
De esta manera, lo primero que hizo fue pagar su hipoteca, luego un seguro de salud y después creyó que esto duraría para siempre. Por lo que entró en una espiral ascendente de adquisición de bienes que jamás habría podido pagar, como autos de lujo y propiedades, y en excesos que antes no tenía, como drogas, alcohol, fiestas y viajes.
¿Qué hizo Luke Brett Moore para reconstruir su vida tras la prisión?
Cuando el banco descubrió su situación, las autoridades australianas fueron a allanar su casa e incautar sus bienes. Ante la falta de abogados fue condenado a 4 años y 6 meses de prisión. Dentro de la cárcel estudió leyes para poder representarse a sí mismo, y gracias a la ley de fianzas y de entidades bancarias encontró los argumentos legales para salir en libertad.
El tribunal consideró que los delitos morales no son penalizables y de esa manera Luke Brett Moore regresó a su casa. Tras su liberación, Moore comenzó a estudiar derecho en la universidad y ahora trabaja como defensor de la justicia penal, con planes de convertirse en abogado. También fundó ISuePolice, una organización dedicada a denunciar la mala conducta policial en Australia.