El jueves pasado, al finalizar su presentación en el congreso A Todo Trigo, que se hizo en Mar del Plata, el secretario de Planeamiento y Gestión para el Desarrollo Productivo y de la Bioeconomía, Juan Pazo, dijo que la eliminación del Impuesto PAIS “es una decisión de Congreso”. No obstante, según tributaristas, productores y economistas, hay otras vías para eliminarlo y una de ellas depende justamente del Poder Ejecutivo, que lo subió por decreto.
En diciembre pasado, apenas asumió el gobierno nacional, se publicó el Decreto 29/2023 del Poder Ejecutivo que elevó el Impuesto PAIS del 7,5% al 17,5% para las importaciones de bienes y servicios con un alcance más amplio. Desde que se implementó la medida, el sector agropecuario ha pedido una señal para que se elimine esta tasa que encarece los precios de los insumos agrícolas y le quita margen a los productores. Sin embargo, el campo todavía no encontró una forma de que el Gobierno haga una excepción.
Al bajar del escenario y ante una consulta de LA NACION, Pazo se refirió a las posibilidades que habría para la eliminación de este gravamen para el sector agropecuario, considerando que alcanza a otros sectores de la economía. “El Impuesto PAIS es una decisión del Congreso de la Nación que tiene una fecha de vencimiento”, respondió. El decreto 29/2023 que llevó la firma del presidente Javier Milei; el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo, fue publicado tres días después de asumir este Gobierno y modificó la reglamentación del Decreto Nº 99/2019, de Alberto Fernández. Este hacía referencia al Impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) de la Ley 27541 de Solidaridad Social y Reactivación Productiva de la Emergencia Pública.
Después de confirmarse el alcance que tendría el impuesto, cuyo decreto citaba a “insumos y bienes intermedios vinculados en forma directa a productos de la canasta básica alimentaria, conforme lo establezca el Ministerio de Economía, a través de las Secretarías con competencia en la materia”, las entidades que nuclean a las empresas y productores agropecuarios pidieron la eliminación. En reiteradas oportunidades argumentaron que esto genera márgenes negativos a los productores por la compra de insumos agrícolas que vienen del exterior.
“Si bien el gobierno nacional ha querido disminuir el costo de los insumos importados hacia el sector, con la baja de aranceles, que es correcto, haberlo realizado de esa manera es la carga que tiene el Impuesto PAIS sobre los insumos importados. Estos son trasladados al sector agropecuario que en este momento actúa como consumidor final de esos insumos”, dijo Horacio Salaverri, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap).
Motivado por los reclamos del campo, Pazo reiteró, contaron distintas fuentes, tanto en las reuniones con el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) y en la Sociedad Rural Argentina (SRA) que el Impuesto PAIS quedaría sin efecto en diciembre de 2024, cuando el decreto pierde vigencia. Una fuente al tanto de esas reuniones dijo que tenían la palabra del funcionario que el citado decreto “no se renueva”, ya que es decisión del Gobierno que en el 2025 este “no persista”. En una industria que también importa insumos agropecuarios reiteraron que el Impuesto PAIS está establecido hasta el 24 de diciembre del 2024, que es cuando pierde vigencia el decreto. Faltan siete meses.
El economista y director de Data Miazzo, David Miazzo, acotó que solo el Congreso puede crear y subir impuestos, pero el Ejecutivo puede eliminarlos. “Lo mismo que sucede con los Derechos de Exportación [retenciones], que el Congreso habilita hasta qué alícuota se le puede poner a cada producto; luego el Ejecutivo puede bajarlas en el margen que desee y cuando quiera y a los productos que quiera. Lo han hecho muchas veces con las economías regionales. Al igual que sucedió con el IVA a los alimentos, en la época de Mauricio Macri”, recordó.
En tanto, el asesor fiscal y experto en temas tributarios, Santiago Sáenz Valiente, dijo que el impuesto se sancionó por ley y, por tanto, su derogación debe ser por el Congreso. “Por decreto sería endeble su derogación, pero como beneficio para los contribuyentes no creo que nadie reclame su forma para eliminarlo. En resumen, las únicas vías para que desaparezca el Impuesto PAIS hay que esperar a que quede sin efecto en diciembre, que se trate en el Congreso o el Ejecutivo puede limarlo por decreto”, planteó.
Técnicos de una entidad ruralista reiteraron que, vía decreto, podría eliminarse perfectamente el artículo de la Ley de Solidaridad, de Alberto Fernández, donde se hace referencia a este Impuesto PAIS. Incluso, mencionaron que si el Congreso quisiera eliminar este artículo podría presentarse un proyecto de ley para eliminarlo.
Salaverri recordó que si a esto se le agrega la decisión del Ejecutivo de no bajar o eliminar las retenciones al campo, sumado a la carga tributaria, los costos de producción y en el precio de venta, la situación se vuelve compleja para el sector.