Lo hizo el venezolano Josef Martínez, de tijera a los 89 minutos, para empatar 2-2 como local ante Columbus Crew. Sigue último en la Conferencia Este. Mirá el video.
05/07/2023 0:08
Clarín.com Deportes Actualizado al 05/07/2023 0:08
El Inter Miami, el próximo equipo del astro Lionel Messi, rescató este martes un empate 2-2 ante el Columbus Crew en la MLS gracias a un espectacular gol de tijera del venezolano Josef Martínez en el minuto 90. Gerardo Tata Martino, flamante DT del conjunto ‘rosa’, volvió a estar en la tribuna a la espera de su habilitación para poder asumir el mando del equipo.
El empate no le permitió al Inter abandonar la última posición de la Conferencia Este al encadenar ya nueve partidos sin ganar, incluidas siete derrotas.
La franquicia, copropiedad de David Beckham, confía en acabar con esta crisis y elevar el vuelo con el esperado aterrizaje este mes de Messi y de su excompañero en el Barcelona Sergio Busquets.
Con 20 partidos disputados, el Inter suma 17 puntos, nueve por debajo de las plazas que dan acceso al Playoffs por el título.
Frente a sus hinchas, Inter Miami intentó firmar su primera victoria desde mediados de mayo pero el mediocampista Darlington Nagbe puso por delante a Columbus en el minuto 23 al enganchar una fuerte volea desde fuera del área.
El delantero ecuatoriano Leonardo Campana igualó el marcador para los locales al cabecear en el área pequeña un servicio de córner en el 57.
En el 69, el delantero Christian Ramírez volvió a poner por delante a los visitantes al aprovechar un despiste de la defensa de Miami y remachar en el segundo palo un centro del colombiano Juan Camilo ‘Cucho’ Hernández.
El Inter consiguió salvar un punto en el minuto 90 cuando el veterano Josef Martínez, quien había entrado como suplente 16 minutos antes, remató a la red con una vistosa tijera un centro en el área de Campana.
En otro resultado de esta jornada de cinco partidos, el Orlando City goleó 4-0 al Toronto FC.
El plato fuerte del día era el clásico entre el vigente campeón Los Angeles FC (LAFC) y su vecino LA Galaxy, que se jugaba en el emblemático estadio Rose Bowl con una asistencia esperada de más de 80.000 aficionados, lo que supondría un récord para un juego de la MLS.